Lo sucedido a continuacion fue lo siguiente: En el mismo dia conmemorativo (un dia despues de las jornadas), las autoridades repartieron un pequeño folleto con un texto-poesia y unos lapices con la famosa consigna "Los lapices siguen escribiendo". Ademas, se organizo un acto en el aula magna que, junto a un video, incluyo un discurso de la vicerrectora, del presidente del Centro de Estudiantes (No voy a dar nombres) y del presidente del Departamento de Historia y la ausencia de una Diputada a causa del debate ese dia presentado por la tan mencionada Ley de Medios (de la cual proximamente me ocupare); en un horario en el que (oh! casualidad!) estaba programada una asamblea para ver que medidas se iban a tomar ante la tan firme decision de los superiores de no dejar marchar a los pibes del Turno Vespertino, se tomo la decision de aun asi marchar (por los Derechos Humanos).
¿Cual fue, nuevamente, el saldo? Bueno, a la vuelta de la marcha los alumnos se encontraron con que las puertas cerradas y, ergo, no pudieron pasar, por "cuestiones de seguridad" (de la cual se deduce que la mayoria estaba mas en peligro afuera que adentro). Finalmente, luego de insistir, se abrieron las puertas y se tomo la decision de ponerles faltas y sanciones a aquellos chicos que habian dado el presente y luego retirarse "sin autorizacion" (habra que agregar, ademas, que la rectora no estaba autorizando las autorizaciones de los chicos de este turno para marchar y despues dispuso que sí apenas 5 minutos antes que se organizara la marcha, de tal manera que nadie hubiese tenido tiempo de ir a su casa o a donde trabajasen sus padres y pedir la autorizacion).
Asi quedo la situacion hasta ese dia, mas tarde seguire narrando cuales fueron los sucesos consecutivos.
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